Manuel Bozzo
(Rosario, Santa Fe, 2004)
En 2023 ganó el primer premio en la categoría juvenil del Concurso de Poesía Felipe Aldana, organizado por la Editorial Municipal de Rosario, con su poemario En el corazón de un país sin nombre. Ese año también fue seleccionado para la Residencia virtual del Festival Internacional de Poesía de Rosario. Actualmente trabaja en el sector industrial metalúrgico y cursa la carrera de Letras en la Facultad de Humanidades y Artes de la UNR.
poemas
Lo único rescatable de esta casa: la disposición.
Mi cama está junto al ventanal del patio
desde acá puedo esperar la noche.
Cuando aclara
la mugre se impregna a la luz
el tiempo suficiente
para ver la ropa sin doblar
asomando por el cajón abierto.
Cuando oscurece
no guardo otra imagen
que la de ese desborde.
No se preocupen
No se preocupen
ya no tengo la fuerza suficiente
para obsesionarme
La angustia es una artesanía
muy delicada para llevar
atada al cuello
A cada uno de mis impulsos
puedo darle el lujo del error
el gesto involuntario
de una ofrenda
El olor a plomo recién usado
El olor a plomo recién usado
rodea tu casa tu espesura
Ya es muy tarde para revertir
una condición de presa distraída
El insomnio tiene la resonancia
de una cueva sin fondo
una bala
un ladrido
un tranvía
una gotera
el estribillo de una canción de cacería
Escribís como quien dispara:
con precisión e indiferencia.
Las estrellas bailan pero vos dormís
Las estrellas bailan pero vos dormís
ciudad nueva
sin catedrales de piedra
ni rocanrol amplificado hasta el cielo
y llegan hasta tu puerta los sonámbulos que dicen
calle arriba está el corazón del carnaval
yo no voy con ellos, esta madrugada por lo menos
no apago las luces, dejo que se superpongan
a las del amanecer.
Yo conozco a los ángeles
Ahora que estoy tan borracho la pantalla parece un pedazo de cielo
la lluvia repica como los pasitos del perro sobre el piso de madera
hago movimientos mínimos en este pesebre de cristal
un hilo de agua cae en un balde, parece joda que esté rezando
pero el agua es una bendición, ¿sabés que yo conozco a los ángeles?
firmé un contrato con ellos en un baño público
me dijeron: a partir de ahora sos libre de hacer lo que quieras
pero no te olvides
con el alma no se jode.
Sigue cayendo agua te toca a vos cambiar el balde
y traé la birra por favor
no se puede estar así
tirados frente a la tele
fumando como desquiciados
saltando de una orilla a otra
tomando las curvas cerradas
balas perdidas en caída libre
el óxido es la sangre del metal
el fuego el eje inmóvil de nuestros días
y si revolvemos el cenicero y encontramos las líneas del futuro
¿vas a estar despierta para leerlas
con voz reseca de gitana?
Me gustaría prestarle atención a la película
lo que pasa es que una vez que se escucha
la gotera no se puede pensar en otra cosa.
Qué suerte la tuya
todavía no te diste cuenta.