El gobernador Omar Perotti participó este martes por la noche en la iglesia catedral San Rafael de la ciudad de Rafaela, de la misa y celebración que dio inicio al ministerio pastoral de Pedro Javier Torres Aliaga como nuevo obispo de esa diócesis, que abarca a los departamentos Castellanos, 9 de Julio y San Cristóbal.
Torres Aliaga fue nombrado nuevo obispo de la diócesis por el Papa Francisco el pasado 11 de noviembre. A su vez, Su Santidad aceptó la renuncia de quien se desempeñaba en ese cargo, monseñor Luis Alberto Fernández, tras haber cumplido los 75 años.
Tras la asunción del nuevo obispo, el gobernador expresó que “Luis, con el afecto que se ha generado aquí, termina una etapa, la cumple, y aparece una figura nueva, y siempre se generan expectativas cuando se da una renovación de las autoridades eclesiásticas para una diócesis tan importante como la que tiene asiento en Rafaela”.
Al respecto, Perotti expresó “nuestro deseo para para él, para toda la comunidad eclesiástica, para cada uno de los creyentes y no creyentes, que sea un aporte a la fe, a la convivencia, que se necesita y mucho. Todos los deseos de éxito en su tarea pastoral, y sin dudas en la vida comunitaria. Sus éxitos y su trabajo, serán para el beneficio de toda la comunidad”.
Asimismo, el gobernador afirmó creer “profundamente en el compromiso de los curas con los más necesitados, con sus trabajos en los lugares más difíciles, y siempre hemos tratado de ayudar para potenciar a esos cientos de anónimos que colaboran en cada parroquia, en cada comedor, en cada tarea de asistencia, en cada tarea de Cáritas. Allí hay que estar, y estar muy cerca”, y agregó que esta nueva etapa que comienza “seguramente será una posibilidad de sumar un nuevo trabajo con quien llega con todas las expectativas de renovar, de entusiasmar y de fortalecer a la diócesis”.
Una vida dedicada a la Fe y a la formación de seminaristas
El nuevo obispo de la diócesis de Rafaela (es el séptimo desde la creación de la misma) nació en Córdoba el 31 de diciembre de 1960 (tiene 61 años) y es el menor de ocho hermanos. Antes de su actual nombramiento se desempeñaba como obispo auxiliar de esa provincia.
Torres Aliaga estudió Filosofía y Teología en el Seminario Mayor Nuestra Señora de Loreto, en Córdoba, donde fue ordenado sacerdote el 6 de diciembre de 1984. Posteriormente se licenció en Teología Moral en la Academia Alfonsiana de Roma. Durante el período de su formación en Italia prestó servicios pastorales en las parroquias San Pío V (Roma), Torviscosa (Udine), Santa Lucía de Livorno, y Pesche.
Como sacerdote colaboró en la formación de los seminaristas, al tiempo que desempeñó tareas en los barrios de la periferia de la capital cordobesa. También llevó adelante la atención de seis parroquias mientras daba clases en los seminarios de Córdoba y de Resistencia.
En 2013 fue nombrado obispo titular del Castillo de Numidia y obispo auxiliar de la arquidiócesis de Córdoba. Actualmente es el presidente de la Comisión Episcopal para el Ecumenismo, las Relaciones con el judaísmo y otras Religiones; y es miembro del Consejo de Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal Argentina.
Cabe destacar que la diócesis de Rafaela comprende a los departamentos Castellanos, San Cristóbal y 9 de Julio, con 38.320 km² de extensión y una población estimada en 300.000 habitantes. Se divide en cinco decanatos, con 36 parroquias, que a la vez se organizan en capillas y centros.
